“Cuidar la piel puede ser sinónimo de complicarse la vida sumarle más cosas a las tantas que hacemos a lo largo del día o imponernos estándares que no tienen que ver con lo que somos o queremos hacer. Sin embargo y como siempre, nuestras propuestas desde Alma se relacionan con que nuestras rutinas tengan como base filosofías amigas de lo lento, de lo simple y de lo propio. Esta es nuestra propuesta
Paso 1 LIMPIAR
– Primero, con un producto oleoso (bifásico) para eliminar impurezas grasas (maquillaje, sebo y polución), recuerden que “lo semejante disuelve lo semejante”.
– Segundo, con un producto acuoso (espuma), “trapear” haciendo una segunda y efectiva limpieza que termina de remover lo que no logró la primera. No sólo es importante retirar restos de maquillaje, sino también retirar células muertas , desobstruir poros, y permitir que paulatinamente la piel se vuelva más sana y luminosa.
– Tercero, y sólo 1 vez por semana, exfoliar tu piel para dejar tu piel renovada y libre de toxinas.
– Cuarto, con tu agua de rosas tonificar para cerrar poros y equilibrar tu PH cutáneo.
(En mi propia rutina diaria, me levanto, hago la primera limpieza con el bifásico, entreno, me meto a la ducha y ahí aplico la espuma, salgo y rocío mi cara con el agua de rosas y listo, entre el aroma a rosas y mandarina no quiero más!)
Luego aplicar el serum para que sus nutrientes y principios activos penetren con la cara limpia. El Serum Alma lo usamos de noche pues tiene aceite de rosa mosqueta que es fotosensible y no se recomienda si me voy a exponer a los rayos del sol. Muy pronto saldrá a la luz un nuevo serum súper poderoso que podrás usar de día también.
Finalmente, usa con mucho cariño y suavidad tu crema hidratante, que no sólo te beneficiará con sus propiedades sino también sellará los nutrientes que ya tu piel recibió.
Sólo durante el día, usar SIEMPRE protector solar.”